El cumplimiento de la justicia requiere la sabiduría de Dios.
A la edad de doce (12), Jesús fue a la fiesta de Pascua en Jerusalén con Sus padres [José y María], donde habló de una manera que hizo que los ancianos en el templo se dieran cuenta de la sabiduría de Dios que estaba dentro de Él. A esa tierna edad, Él ya había absorbido la enseñanza [la Palabra del Padre] en Sí Mismo. Esto fue antes de la fecha fijada por el Padre, es decir, el comienzo de su ministerio y antes de los treinta (30) años.
								